jueves, 28 de septiembre de 2017

La Albufera de Valencia

Supongo, que como a mucha gente, nos cuesta creer que podamos sentir la naturaleza cerca de una gran ciudad. En esta entrada voy a mostraros uno de esos sitios que rompen la regla de las junglas de hormigón. En la Albufera de Valencia podréis encontrar el equilibrio entre naturaleza, oficios antiguos y fauna, tan solo a dos pasos de una urbe de casi 800.000 habitantes. 


Valencia (Ciudad de las ciencias)
Dejando atrás los megalíticos edificios de Valencia capital, diseñados en plena burbuja inmobiliaria con más intereses económicos que inteligencia nos dirijimos hacia El Palmar. Un antiguo pueblo pesquero en el que se aprovechó el tirón de la albufera para promocionar la gastronomía de la Comunidad Valenciana. Paellas de arroz combinadas con 100 ingredientes distintos se observan en todos los bares y restaurantes de la pequeña localidad. Pese a ser un núcleo casi totalmente turístico, los escasos habitantes locales han sabido compaginar su rutina de agricultura en el cultivo de arroz y la pesca con los servicios turísticos. No es raro ver pequeñas casas de doble altura a la orilla de la Albufera con carteles caseros que ofertan todo tipo de excursiones por la laguna.
Granja acuícola
Estas casas particulares ofrecen los mismos servicios que las compañías "oficiales" pero por un precio menor (aunque la diferencia es mínima). Como imaginaréis recalco mucho los servicios navieros porque creo que es una de las mejores maneras de conocer la Albufera para el visitante. 
Embarcación pesquera particular

Si te decantas por la opcion "casera", podrás ver en las propias casas particulares utensilios de pesca y caza, incluso algún museo muy básico sobre las formas de subsistencia de la zona. 
Típica edificación de la zona

Si optas por un paseo en barca, encontrarás diferentes zonas a lo largo de la laguna. Desde bosques de Juncos hasta grandes planicies de agua llenas de vida. Los patos,las garzas, y otras especies de aves encuentran en la Albufera refugio y comida en cada esquina. 
Las embarcaciones abandonadas también forman paisajes idílicos
                                 


Como se puede observar, el viaje se hace entretenido, incluso corto. Una buena hora para visitar la Albufera en mi opinión es el atardecer, debido a la luminosidad y a que muchas de las aves vuelven a merodear cerca de sus escondites. 

Una de los muchos canales que dan acceso a la laguna

Aves volando sobre la laguna
Sin duda, una experiencia agradable y relajante a muy pocos kilómetros de Valencia. Recomendada para los amantes de las aves y accesible a todos los públicos. 




No hay comentarios:

Publicar un comentario